Yo sé que puedes salir de ahí

 Buenos días mi vida, hoy estoy aquí para hablarte al corazón y decirte todo lo que significas para mí. Mi chiquita, sé que nada está funcionando ahora y entiendo que te sientas perdida por ello, ven, acerca tu cabeza a mi corazón, quiero acariciar tu pelo y hablarte despacito. 

No importa si tus lágrimas caen mientras te acaricio, solo anhelo que descanses y olvides todo por un momento, mientras te sientes amada porque lo mereces, aunque creas que no es cierto. Sé que te han dañado, pero yo quiero escribir una historia distinta, sanando esos espacios donde te han lastimado, para que te veas preciosa y salgas de ese sin sentido que te está torturando. 

También he sentido tus miedos, no los ocultes, aquí puedes mostrarlos. Te doy ese lugar para demostrártelo. Sí, yo también he sentido temor hacia perder, decir adiós, hacia el futuro o, a decir "no" y comprendo tu tristeza al verte insuficiente, aún cuando has dado todo lo que había en tu corazón.

Espero que estas palabras destruyan el mal concepto de tu "yo" que se ha formado con esa situación. Eres suficiente y nada de lo que repiten tus pensamientos condiciona tu valía y merecimiento de amor, ni siquiera, caer en un error.

Yo te doy la oportunidad de levantarte y eliminar la etiqueta de fracaso que te ha puesto el exterior, puedes hacerlo y estoy aquí para tomar tu mano, apoyarte y sostenerte cuando hieran tu alma, gritándole que no.

Debany Guadalupe Pérez Pérez

Comentarios

Entradas populares de este blog

La estructura de tu corazón es valiosa

Lo estás haciendo bien

Carta a Dios